Jonatan Álvez fue uno de los destacados ante Clan Juvenil, pero se portó malcriado. Foto: API

Jonatan Álvez fue uno de los destacados ante Clan Juvenil, pero se portó malcriado. Foto: API

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15 de agosto de 2017 18:36

Barcelona SC sancionará internamente dentro de su nuevo código disciplinario

Redacción El Comercio

Barcelona SC cuenta con un nuevo Reglamento de Régimen Disciplinario, desde hace 12 días. Sobre esa base se sancionan los actos de indisciplina, ya sea deportiva o administrativamente. El documento, de 55 páginas, rige para jugadores, cuerpo técnico y dirigentes.


El pasado 3 de agosto, el vicepresidente financiero Alfredo Cuentas informó que habían terminado la actualización del documento, bajo la dirección del abogado Alfredo Parra, miembro de la Comisión Jurídica.

Parra cuenta que Barcelona SC tenía un reglamento interno desde los años 80, pero a partir de febrero de este año se realizaron actualizaciones al texto. Se incluyeron temas como propiedad de la imagen de los jugadores, atrasos, indisciplina y otros.

En ese cuadernillo está especificada la sanción que tendrá el delantero Jonatan Álvez, después del entredicho que tuvo con el entrenador Guillermo Almada, el domingo pasado, durante el partido contra Clan Juvenil, en Quito.

Las sanciones se dan de manera progresiva, según contó el jurista a este Diario. “Van desde amonestación verbal, luego escrita y posteriormente una multa”. Evitó mencionar la acción a tomar en torno al comportamiento de Álvez.

Almada, Carlos Alfaro Moreno y José Francisco Cevallos, reconocieron que durante el año ya hubo jugadores sancionados, pero evitaron mencionar sus nombres, por un principio de “manejo interno”. Pese a la negativa de los directivos, de manera extraoficial se conoció que este año hubo por lo menos cuatro jugadores sancionados.

Lo que sí dejó claro el DT fue que el delantero charrúa es reincidente. “Jonatan ha tenido sus sanciones y ustedes no las han sabido y tampoco nos interesa que las sepan”, dijo en rueda de prensa.

Este año, además del entredicho con Almada, el atacante tuvo riñas con sus compañeros en las prácticas. Primero con Christian Alemán, en un entrenamiento a puerta cerrada y luego con Darío Aimar, con presencia de periodistas.