5 razones para pensar que Ecuador fracasó en la Copa
La Copa América Centenario se acerca a su fin y es momento de evaluar a Ecuador, cuya selección fracasó nuevamente en esta cita. Si el fracaso es definido por la Real Academia como “resultado adverso” o “suceso lastimoso, inopinado y funesto”, pues estas son las razones para pensar que la Tricolor fracasó en la Copa América:
1. No fue la mejor Copa de todos los tiempos
Es verdad que al menos Ecuador pasó de ronda, algo que hace casi dos décadas no ocurría. Sin embargo, tampoco fue la “mejor Copa de todos los tiempos”, como había prometido el presidente de la Ecuafútbol, Carlos Villacís. Ni siquiera fue una buena Copa, pues la Tricolor apenas le pudo ganar a Haití, algo totalmente previsible. De ahí, no pudo derrotar a ningún equipo importante y tampoco pudo demostrar por qué es el líder de las eliminatorias sudamericanas. Lo único realmente histórico fue que, desde 1963, Ecuador no le sacaba un punto a Brasil en Copa América. Pero se trata del Brasil de Dunga, y sin Neymar y un puñado de cracks lesionados, así que tampoco es para sacar pecho. El rendimiento de Ecuador no llegó al 42%, inferior al de Costa Rica, que acabó décimo.
2. Pésimos primeros tiempos
Algo tienen los primeros 45 minutos que afectan a la Tricolor. Con Brasil, Perú y Estados Unidos, Ecuador regaló la mitad del cotejo. Con los peruanos alcanzó a empatar pero casi lo pierde en la última jugada. Y con los anfitriones no alcanzó. Se dirá que crecer en el segundo tiempo es una señal positiva de la capacidad de reacción de plantel, pero no lo es tanto cuando el rival es el que ofrece espacio y balón porque desea cuidar el resultado.
3. Eliminados por un equipo inferior
La realidad indica que el Estados Unidos que construye Klinsmann es un equipo de talento inferior al plantel tricolor. Como buen alemán, Klinsmann apela mucho al físico, a la potencia y la disciplina; pero sus jugadores no tiene el manejo de pelota que sí poseen los ecuatorianos. Por eso, y por su ubicación tanto en las eliminatorias como en el escalafón FIFA, eliminar a Ecuador fue tomado en EE.UU. casi como una hazaña, una gesta deportiva.
4. Un entrenador bocafloja
La presión está haciendo mella en Gustavo Quinteros, quien a lo largo del torneo usó groserías para dirigirse a sus detractores. Para colmo, le llenó de ‘flores’ al juez en pleno partido y lo expulsaron. Vergonzoso. Innecesario. Así que ya no sabemos con qué Quinteros quedarnos, con el que no para adecuadamente al equipo en el primer tiempo o el que lo recompone casi milagrosamente para el segundo. Con el que apela a nuevos valores como Arturo Mina y Carlos Gruezo, o el que le niega una oportunidad a Orejuela o al ‘Tin’ de Independiente. Cuál será el que se impondrá al final.
5. Figuras que no rindieron
Pocos jugadores realmente se destacaron por parte de Ecuador, que padeció la falta de un 9 y que extrañó mucho a Felipe Caicedo. En general, no hubo un crack, una figura descollante. Arturo Mina pudo consolidarse y Jefferson Montero desparramó energía, pero no hubo mucho más. Otra vez la Copa quedó inalcanzable.