El francés Karim Benzema (izq.) es felicitado por sus compañeros del Real Madrid por su gol. Foto: EFE

El francés Karim Benzema (izq.) es felicitado por sus compañeros del Real Madrid por su gol. Foto: EFE

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22 de noviembre de 2016 17:28

Real Madrid ganó al ex equipo de Cristiano Ronaldo en Lisboa

Agencia DPA

El Real Madrid ganó este martes 22 de noviembre 2-1 en el campo del Sporting de Lisboa gracias a un espléndido cabezazo de Karim Benzema a tres minutos de la conclusión, que permitió a los blancos calsificarse para los octavos de final de la Liga de Campeones y pelear por el liderato en la última jornada.


El equipo blanco, muy cansado, sufrió mucho a pesar de llegar al descanso con ventaja por el gol de Raphael Varane. En la segunda mitad marcó Adrien Silva de penal y con cierta agonía Benzema propició una victoria del Real Madrid que permitirá a los blancos luchar en casa por ser primero ante el Borussia Dortmund.

La primera parte fue muy pareja y el Real Madrid se fue con ventaja simplemente porque tuvo más eficacia que su rival. De nuevo, impuso la ley de su pegada, tan mortífera, aunque esta vez llevó la firma de un central.

Zidane volvió a apostar por el mismo dibujo y los mismos futbolistas que el pasado sábado 19 ganaron 3-0 en el campo del Atlético de Madrid, con la única novedad de la entrada de Sergio Ramos por Nacho Fernández en el centro de la zaga.

El partido en el estadio José Alvalade registró una asistencia de 50 046 espectadores, cifra con la que batió el récord de público de la historia del estadio.

La vuelta del portugués Cristiano Ronaldo a la casa donde creció generó muchas expectativas entre los aficionados verdiblancos, que llenaron el estadio hasta los topes, acompañados por unos 1 400 aficionados del Real Madrid.

El anterior récord de asistencia estaba fijado en 49 992 personas, dato que se alcanzó en la inauguración del estadio en agosto del 2003, en un partido amistoso ante el Manchester United que el Sporting ganó 3-1.

Sin embargo, Cristiano firmó una actuación muy gris, sin impacto alguno en el juego.