Los cinco pecados de Ecuador en la derrota ante Colombia en Quito

Es cierto lo que dijo el técnico Gustavo Quinteros de que la Tri perdió ante Colombia por sus propios errores, pero también es cierto que el estratega tampoco supo corregir esas fallas. La Selección realizó cambios en su nómina, pero su forma de jugar es la misma.

1. Cambio solo de nombres
Ecuador incluyó en este cotejo a Mario Pineida por Juan Carlos Paredes, a Ángel Mena en lugar de Miller Bolaños y Matías Oyola por Cristhian Noboa, quienes fueron criticados por su bajo rendimiento ante Paraguay. Ingresaron estos dos jugadores y el rendimiento de la Tri fue el mismo. Ellos cumplieron la misma función, pero no hicieron diferencia individual ante un rival que marcó perfectamente en bloque. 

2. El esquema no varía
De lo anterior, la influencia de los jugadores que tuvieron oportunidad de tener un mejor rendimiento sobre los habituales titulares, también dependió del esquema y el trabajo táctico en Ecuador. 

El equipo se repitió con su sistema de 4-4-2, pero, ¿por qué no buscar sorprender al rival con un sistema 3-5-2 o 4-2-3-1? Los jugadores convocados trabajan en sus clubes con estos esquemas, sobre todo el último. Era momento de que la Tri probara algo diferente para desorientar a Colombia, que le bastó con clausurar las bandas y someter a Felipe Caicedo, un juego repetitivo y previsible con otros nombres pero con la misma interpretación.

3. Los del torneo local también juegan
Gustavo Quinteros se ha quejado constantemente sobre la complicación que representa a los legionarios jugar en la altitud de Quito, sumado a los viajes y la falta de descanso. La solución estuvo en sus manos, pues debió apoyarse entonces mayoritariamente en los futbolistas de buen desempeño en el torneo local.

Hacer una base de jugadores para plantarse de visitante y otra como local, también es una estratega válida para desubicar al rival. ¿Nombres? Gabriel Cortez, Jonathan Cifuentes, Marcos Caicedo, Mario Pineida, Michael Estrada... entre los más destacados. Estos jugadores pudieron contribuir a una mayor presión por su alto rendimiento en la altitud, tomando en cuenta que atraviesan un buen momento en sus clubes. Después de todo, el DT aseguró que siempre convocaría a quienes "están en mejor nivel".

4. ¿Y el buen momento de los jugadores?
Arturo Mina vive uno de sus peores momentos futbolísticos, pues en Argentina perdió la titularidad en River Plate. Su rendimiento dista del que exhibió en Independiente del Valle. Quizás, él requiera de un trabajo más psicológico para recuperarlo. 

¿Con quién se lo puede reemplazar? Aunque criticado, Gabriel Achilier se afianzó en México, es capitán y demostró liderzago cuando ingresó. Localmente, centrales como Darío Aimar y Robert Arboleda realizan un destacado torneo.

Lo mismo ocurre con Walter Ayoví y Juan Carlos Paredes, quienes son alternantes en sus equipos. Énner Valencia tiene altibajos en el fútbol inglés. Sin embargo, Quinteros confía en ellos y prefiere repetirlos en las formaciones. Ese mismo nivel se refleja en la Tri. Cuando Marcos Caicedo y Gabriel Cortez ingresaron, se vio otra dinámica, aunque su aporte se vio minado por la expulsión inmediata de Luis Caicedo.

5. Sin disciplina táctica
En los duelos ante Paraguay y Ecuador, los jugadores nunca terminaron de ubicarse en la cancha. Un ejemplo fue que Antonio Valencia siempre debió correrse hacia el centro del área porque no hubo cargas por la banda derecha.

Los volantes centrales (Cristhian Noboa, Jefferson Orejuela y Matías Oyola) lucieron inconexos con la línea ofensiva porque Énner Valencia y Miller Bolaños (Ángel Mena) tampoco cumplieron con desbordar por los costados y debieron correrse hacia el centro. Es decir, rotaron por todo el frente de ataque. Sin relevos, juego asociado y entendimiento colectivo, a Ecuador siempre se le complicó llegar con claridad al área rival.