Manchester United iguala con el Liverpool en partido 300 de Antonio Valencia

En uno de los duelos más atractivos de la octava semana de la Premier League, el Manchester United visitó al Liverpool en el mítico estadio de Anfield. En un espectáculo plagado de figuras, marcado por las ausencias de Pogba, Fellaini, Carricke e Ibrahimovic (todos lesionados) los conducidos por Mourinho se presentaron con el objetivo de mantener la cima del campeonato.

​Durante la primera etapa se observó un choque de ida y vuelta. Los de Klopp demostraron sus intenciones ofensivas a través de Firmino, Philippe Coutinho y Henderson, aunque sus exigencias fueron desactivadas por David De Gea, uno de los mejores arqueros del momento.
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​La visita, en tanto, apostó por la individualidad de Lukaku, quien a través de su potencia física desarticuló a la defensa local y puso en aprietos a Mignolet. Sin embargo, el entretiempo llegó con el marcador en blanco.

En el complemento el choque continuó bajo la misma sintonía: muchas llegadas y pocos aciertos. Con las salidas de Mkhitaryan y Martial el entrenador portugués buscó mayor efectividad en la ofensiva, pero ni Lingard, ni Rashford fueron la solución.

Una situación similar a la que planteó el DT alemán, quien reemplazó a Philippe Coutinho y a Mohamed Salah por Chamberlain y Sturridge. Con los arcos en cero, la repartición de puntos no conformó a ninguno.