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Gustavo Quinteros se mostró contrariado después de la derrota ante Colombia.

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¿Qué le pasó a Ecuador?

Santiago Guerrero Vinueza

Apóstol Santiago 

La Selección tuvo un choque muy duro. En los dos últimos partidos de Eliminatorias, Ecuador se enfrentó con la realidad. Paraguay y Colombia les dieron a los dirigidos por Gustavo Quinteros una cachetada que nos regresa a todos a la más cruel verdad: el camino a Rusia no será tan fácil como nos habíamos imaginado.

@sasty7

En los encuentros jugados en Quito y Barranquilla, la Tricolor cometió un sinnúmero de errores. La mayor parte de ellos deben ser asumidos por el entrenador, pero también por el plantel de jugadores. Por necios y tercos, Ecuador cedió una ventaja que la había ganado merecidamente en las cuatro primeras fechas.

El DT insistió en jugadores que no habían tenido ritmo y eso lo sabía él y por supuesto, el técnico rival que estudió a Ecuador hasta el cansancio. Jefferson Montero es titular indiscutible en la Selección, pero si llega sin jugar un partido oficial en más de tres meses, mantenerlo en cancha es insostenible. Solo por citar un ejemplo.

Además, el cuerpo técnico tuvo muy poca capacidad de reacción. En ambos encuentros los cambios llegaron tarde, cuando la suerte estaba casi echada. Y las desafortunadas declaraciones de Quinteros después de la derrota en el estadio Metropolitano de Barranquilla solo confirman que se equivocó al tomar decisiones.

Pero lo más preocupante de todo es la incertidumbre que dejó esta doble fecha sobre la zona defensiva. Los cuatro titulares de la zaga (Paredes, Achilier, Erazo y Ayoví) tienen un promedio de 30 años y por ahora ninguno de ellos cuenta con un reemplazo al menos de una calidad parecida.

Gustavo Quinteros tiene un duro trabajo antes de enfrentar la Copa América (u00a1en apenas dos meses!): empezar a buscar los recambios para jugadores que se irán más temprano que tarde. La Eliminatoria terminará recién en octubre del 2017 y hasta eso, la Selección debe atravesar una renovación en algunas posiciones y sin alterar el ritmo de juego.

Solo el tiempo dirá si Ecuador fue capaz de reaccionar a tiempo.

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